El empresario Ricardo Salinas Pliego se lanza contra Claudia Sheinbaum y Morena tras los señalamientos por la deuda fiscal de su conglomerado
El presidente de Grupo Salinas, Ricardo Salinas Pliego, reaccionó en redes sociales a las recientes declaraciones de la presidenta Claudia Sheinbaum, quien acusó públicamente al empresario de intentar evadir una deuda millonaria con el Servicio de Administración Tributaria (SAT). Lejos de suavizar el tono, el magnate utilizó su cuenta oficial de X (antes Twitter) para lanzar una serie de calificativos directos contra el gobierno de Morena, al que llamó “grupo de criminales”.
En un mensaje publicado este fin de semana, Salinas Pliego escribió: “Mi gran ventaja sobre las … de MORENA es que yo sí sé cómo generar dinero, ofrecer productos y servicios al pueblo, y resolver los problemas de quienes más lo necesitan”. La afirmación fue acompañada por una crítica a lo que considera un aparato político incapaz de producir riqueza, y que, según él, solo se dedica a robar, mentir y extorsionar.
Las declaraciones surgen luego de que Sheinbaum expusiera en su conferencia matutina que el empresario adeuda más de 74 mil millones de pesos al fisco, cantidad que, según la mandataria, supera el presupuesto federal de 25 estados del país. La presidenta también vinculó el enojo del empresario y sus medios con la pérdida de privilegios, como la exclusión de TV Azteca del gasto oficial en publicidad gubernamental desde el año pasado.
En respuesta, Salinas Pliego se mostró desafiante. “¿No me cree? Fíjese bien quién vive escondido… y quién está trabajando por un mejor país”, escribió en otra parte del mismo mensaje. La publicación, que generó miles de reacciones en pocas horas, fue interpretada como una clara alusión a la figura presidencial y a los ministros de la Suprema Corte, cuya renovación ha sido propuesta por Sheinbaum como parte de su reforma judicial.
En medio de esta confrontación pública, el empresario también dedicó unas palabras a Raúl, un seguidor en redes sociales que lo cuestionó sobre el tema. “Recuerde Raulito que no se puede vencer a un hombre que no se rinde. Y está usted hablando con uno de ellos”, añadió. La frase fue acompañada por un emoji de gafas oscuras, habitual en sus publicaciones más irónicas o provocadoras.
El intercambio de declaraciones refleja el ambiente tenso entre el gobierno federal y uno de los empresarios más influyentes del país. Mientras Sheinbaum insiste en que ningún grupo económico debe estar por encima de la ley, Salinas Pliego recurre a una narrativa de éxito individual frente al poder político. El caso se agrava con el contexto judicial: la Suprema Corte podría pronunciarse pronto sobre la legalidad del adeudo que Grupo Salinas ha impugnado durante 16 años.
A pesar del tono confrontativo, el mensaje del empresario parece apuntar a una defensa pública de su figura y su legado empresarial. Argumenta que ha contribuido a la economía nacional ofreciendo empleo y servicios, mientras acusa a sus detractores de no entender cómo funciona el sector productivo. No obstante, la respuesta social ha estado dividida: algunos respaldan su postura combativa, mientras otros exigen que cumpla con sus obligaciones fiscales.
Claudia Sheinbaum, por su parte, ha reiterado que no se trata de una persecución, sino de hacer valer el estado de derecho. “Queremos que pague lo que debe, conforme a la ley”, dijo en una de sus conferencias recientes. También recordó que los 74 mil millones de pesos podrían financiar hospitales, programas de becas y apoyos sociales, lo que refuerza el argumento de que la deuda no es un tema privado, sino de interés nacional.
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