Designar beneficiarios, informarles sobre tu cuenta y mantener actualizados tus datos son pasos clave para asegurar que tus ahorros lleguen a quienes tú decidiste.
En México, los recursos acumulados en tu cuenta de AFORE no se pierden si falleces. Por ley, ese dinero puede ser heredado por tus beneficiarios, ya sea en forma de pensión o como entrega directa.
Sin embargo, el proceso depende de si designaste beneficiarios formales y del tipo de régimen bajo el cual cotizaste. Existen dos tipos de beneficiarios: legales y designados. Los legales son aquellos reconocidos por la Ley del Seguro Social, como cónyuge, hijos menores de edad o padres dependientes.
Ellos pueden recibir una pensión si cumplen con los requisitos establecidos por el IMSS o ISSSTE. Los designados, en cambio, son personas que tú elegiste libremente para recibir los fondos no destinados a pensión, y pueden ser familiares, amigos o cualquier persona de confianza. Si no designaste beneficiarios en tu AFORE, el proceso se complica.

La familia deberá iniciar un juicio de designación ante la autoridad laboral para que se determine quién tiene derecho a los recursos. Esto puede tardar varios meses y generar conflictos entre familiares, especialmente si hay desacuerdos o desconocimiento sobre el trámite. Para evitar estos problemas, es fundamental que registres a tus beneficiarios directamente en tu AFORE. Puedes hacerlo en línea mediante la app AforeMóvil o en las oficinas de tu administradora.
También puedes asignar porcentajes específicos si deseas repartir tus ahorros entre varias personas. Una vez que ocurre el fallecimiento, los beneficiarios deben acudir a la AFORE correspondiente con documentos como acta de defunción, identificación oficial, CURP y comprobantes de parentesco. La institución orientará sobre los pasos a seguir y los tiempos estimados para la entrega de los recursos.
Es importante saber que los recursos pueden entregarse en una sola exhibición o como pensión, dependiendo del régimen bajo el cual cotizaste (Ley 73 o Ley 97). Si el trabajador estaba bajo la Ley 73, los beneficiarios podrían recibir una pensión vitalicia. En cambio, bajo la Ley 97, se entregan los fondos acumulados en la cuenta individual.
Además, si el fallecido era beneficiario de programas como la Pensión Bienestar, existe un apoyo adicional llamado Pago de Marcha, que se otorga por única vez al auxiliar registrado o a un familiar directo. Este beneficio busca brindar respaldo económico inmediato en momentos difíciles.