¿Cómo puedo evitar pagar impuestos en Temu?

Revendedores vs. SAT: Las estrategias detrás de las compras en Temu sin pagar impuestos

Desde agosto de 2025, comprar en plataformas como Temu dejó de ser tan barato como antes. El Servicio de Administración Tributaria (SAT) implementó un nuevo esquema fiscal que impone un impuesto del 33.5% a productos provenientes de China, incluyendo los pedidos realizados en Temu. Esta medida busca frenar el contrabando digital y regularizar las importaciones que antes pasaban desapercibidas por las aduanas mexicanas.

Ante este panorama, muchos revendedores han comenzado a modificar sus estrategias para seguir operando sin que el nuevo impuesto afecte sus márgenes de ganancia. Una de las tácticas más comunes es realizar pedidos pequeños, por debajo de los 50 dólares, desde Estados Unidos o Canadá, países que forman parte del T-MEC. En estos casos, los productos están exentos del Impuesto General de Importación (IGI) y del IVA, lo que permite recibir mercancía sin pagar el gravamen completo.

Otra práctica extendida entre revendedores es el uso de consolidadores logísticos o intermediarios que agrupan varios pedidos en un solo envío desde países con tratados comerciales. Al declarar valores menores o dividir los paquetes, logran que cada uno entre bajo el esquema simplificado, evitando así el pago del 33.5%. Aunque esta técnica bordea la legalidad, sigue siendo utilizada por quienes buscan mantener precios competitivos en sus tiendas digitales.

Revendedores vs. SAT: Las estrategias detrás de las compras en Temu sin pagar impuestos.

También se ha detectado el uso de plataformas de reenvío que reciben los productos en Estados Unidos y luego los envían a México como “regalos” o “muestras sin valor comercial”. Si bien esta estrategia no garantiza la exención total del impuesto, en muchos casos permite que los paquetes pasen sin revisión exhaustiva, especialmente si el valor declarado es bajo y el volumen es reducido.

Sin embargo, estas prácticas no están exentas de riesgos. El SAT ha reforzado la vigilancia en aduanas y ha advertido que subvaluar mercancías o declarar información falsa puede constituir delitos de contrabando o defraudación fiscal. Además, los compradores podrían enfrentar cargos adicionales si la paquetería detecta discrepancias entre el contenido y la documentación del envío.

Para los revendedores que buscan operar dentro del marco legal, la recomendación es ajustar sus precios, considerar proveedores nacionales o buscar productos en países con tratados comerciales vigentes. Aunque el nuevo impuesto representa un reto, también abre la puerta a modelos de negocio más sostenibles y transparentes, en un mercado que cada vez exige mayor formalidad.