El documento, conservado por su familia durante más de un siglo, se ha convertido en un testimonio histórico de una de las tragedias marítimas más recordadas del siglo XX.
Una carta escrita por Sidney Daniels, joven lavaplatos que sobrevivió al hundimiento del Titanic en 1912, fue presentada en el programa británico Antiques Roadshow y valorada en 10 mil euros.
La carta fue escrita por Sidney Daniels, quien tenía 18 años cuando trabajaba como lavador de platos en el Titanic. La noche del 14 de abril de 1912, Daniels dormía profundamente cuando fue despertado por un vigilante tras la colisión con el iceberg. Al principio creyó que se trataba de un simulacro, pero al subir a la cubierta comprendió la gravedad del momento.
Según relató su hija en el programa, Daniels intentó despertar a los pasajeros, muchos de los cuales se negaban a abandonar sus camarotes, convencidos de que el barco era insumergible. En medio del caos, ayudó a niños a colocarse los chalecos salvavidas y los llevó a la cubierta.
Cuando todos los botes habían partido y el agua le llegaba a las rodillas, Sidney saltó al mar, nadó hasta un salvavidas flotante y luego se aferró a una balsa volcada, donde pasó la noche cantando himnos junto a otro sobreviviente para no morir de hipotermia.
Durante todo ese tiempo, Daniels llevaba consigo una carta en el bolsillo de su uniforme. El documento, dirigido a su madre, sobrevivió al agua salada y al paso de los años. Su nieta lo presentó en Antiques Roadshow, donde la especialista Hilary Kay lo calificó como “extraordinario” y lo valoró en 10 mil euros, aunque reconoció que su valor simbólico supera con creces el económico.
Pese al interés comercial, la familia de Daniels se negó rotundamente a vender la carta. “No es una salida en familia, es una visita a un museo”, afirmó su descendiente, dejando claro que el documento permanecerá como un legado privado que honra la memoria de su antepasado y de todos los que vivieron el desastre del Titanic.
