Del Monte Foods en quiebra tras 139 años de operación

La marca Del Monte, aunque debilitada, conserva un valor significativo en términos de reconocimiento y presencia en los hogares estadounidenses

Estados Unidos.- Del Monte Foods, una de las empresas alimenticias más emblemáticas de Estados Unidos, se ha declarado en bancarrota este 1 de julio de 2025, acogiéndose al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras.

Esta decisión representa un punto de inflexión para la compañía fundada en 1886, que por décadas dominó el mercado de productos enlatados y alimentos procesados.

La empresa asegura haber obtenido un financiamiento de 912.5 millones de dólares para mantener sus operaciones durante el proceso judicial. Su CEO, Greg Longstreet, calificó esta reestructuración como “una transformación estratégica” orientada a revitalizar la marca y fortalecer su viabilidad futura. Mientras se analiza la venta de activos, Del Monte afirma que continuará produciendo y distribuyendo alimentos sin interrupciones.

La crisis de Del Monte responde a una convergencia de factores: cambios en el comportamiento del consumidor, presiones inflacionarias y altos costos de producción. El giro hacia opciones frescas y saludables ha desplazado el consumo de alimentos enlatados, mientras que los aranceles al acero, material clave para sus latas, han encarecido la cadena de suministro. A esto se suma una deuda acumulada de más de 1,250 millones de dólares, agravada por tasas de interés más altas.

Del Monte se declara en quiebra.

Para Latinoamérica, en especial México, la noticia tiene implicaciones limitadas. Las filiales internacionales de Del Monte, incluidas las plantas en Irapuato y Nuevo León, no están sujetas al proceso de bancarrota y seguirán operando con normalidad. Cabe recordar que en 2022, Del Monte anunció una inversión de 30 millones de dólares en México para fortalecer la exportación de cítricos y bebidas, reflejo de su apuesta por los mercados regionales.

El caso será supervisado por el Tribunal de Quiebras de Nueva Jersey, y ya se especula que fondos de inversión y competidores globales podrían estar interesados en adquirir partes de la compañía.