SAT en alerta por depósitos en efectivo que superen estos montos específicos cada mes

Es un límite de ingresos que el SAT revisa de tus tarjetas de débito de cualquier banco

México.- El límite de los 15,000 pesos mensuales en efectivo funciona como un “punto de alerta” para los bancos, no como un permiso para evitar impuestos.

Bancos reportan al SAT depósitos en efectivo que superen montos específicos cada mes.

Aunque no sea reportado automáticamente, si el SAT llega a notar ingresos no justificados por otros medios, como por discrepancias en tus declaraciones o auditorías aleatorias, aún puede pedir explicaciones o realizar revisiones. La clave está en que el depósito en sí mismo no genera un impuesto, sino que puede ser interpretado como ingreso si no se justifica debidamente.

Todos los usuarios con tarjetas deben saber que los bancos están obligados a reportar al SAT los depósitos en efectivo que superen ese monto cada mes. Esto aplica solo a depósitos en efectivo, no a transferencias electrónicas, pagos con tarjeta o cheques.

El SAT usa esta información para cruzar datos con tus declaraciones fiscales y detectar posibles discrepancias.

Las tarjetas bancarias nivel 2, destinadas a personas físicas que reciben subsidios y apoyos gubernamentales, tienen un límite mensual de depósito de 24,121 pesos mexicanos. No obstante, cuando los recursos provienen directamente de programas oficiales, este tope se amplía al doble, lo que representa un máximo permitido de 48,243 pesos mensuales.

Bancos reportan al SAT depósitos en efectivo que superen montos específicos cada mes.

¿Qué pasa si detectan algo raro?. Si el SAT encuentra que tus depósitos no coinciden con tus ingresos declarados, puede solicitarte comprobantes del origen del dinero (facturas, contratos, recibos). Iniciar una auditoría para revisar tus movimientos financieros. Clasificar los depósitos como ingresos acumulables, lo que podría generar impuestos pendientes.

Aplicar multas o recargos si no justificas adecuadamente los fondos. En casos graves, como sospecha de lavado de dinero o fraude fiscal, que desatarían acciones legales.

Para evitar problemas con el SAT, toda persona física debe declarar sus ingresos, incluso si son préstamos, tandas o ventas informales. Otra de las recomendaciones es guardar comprobantes de cada depósito con conceptos claros al hacer transferencias como “renta”, “colegiatura”, “préstamo familiar”.